Elevar la temperatura de la calefacción por encima de los 22 grados centígrados "no es rentable ni para la salud ni para el bolsillo", ya que por cada grado de más la factura puede encarecerse entre un 6% y un 8%, según indica la Asociación Nacional de Ahorro y Eficiencia (ANAE).
Este consejo aparece recogido en una lista con catorce recomendaciones elaborada por ANAE para "matener a raya" el gasto en calefacción y hacer frente a un coste que se ha ido haciendo cada vez más gravoso para muchas familias que sufren la crisis y que en algunos casos se encuentran en situación de pobreza energética.
Al margen de los consejos prácticos, la asociación indica que hay una norma que prevalece sobre el resto, que es la de aislar la vivienda. Para ello, es necesario mejorar la "envolvente térmica", si bien por lo general este esfuerzo implica un gran desembolso económico que, pese a ser rentable a largo plazo, muchas familias no pueden afrontar.
Al aludir al control de temperatura, ANAE recomienda entre 20 y 22 grados en el salón o estudio, entre 17 y 18 en los dormitorios y entre 21 y 22 en los baños. También aconseja usar chaquetas o jerséis en casa, en vez de ir en manga corta.
También es aconsejable evitar la entrada de aire frío en el interior de la vivienda, para lo que es necesario sellar rendijas o huecos. En este sentido, se pueden aislar los tambores de las persianas con poliestireno expandido u algún otro aislante económico, e incluso sellar las juntas con silicona.
Otra medida adecuada es usar un termostato para regular la temperatura de la vivienda, o incluso un termostato programable. Por la noche o si no hay nadie durante unas horas, se recomienda apagar la calefacción o bajar el termostato a un nivel de mantenimiento.
Purgar los radiadores
ANAE también aconseja revisar la caldera antes de la temporada de invierno, vigilar en el manómetro la presión de agua para que sea suficiente, cambiar el agua y purgar bien los radiadores, no tapar los radiadores con objetos ni ocultarlos detrás de cortinas o visillos e instalar paneles reflectantes detrás de los radiadores.
Si se desea más confort y rendimiento del radiador, también se recomienda instalar un dispositivo de tiro forzado de aire mediante ventilador. Estos dispositivos son de funcionamiento automático, pues se activan con el calor del radiador, y tienen un consumo eléctrico muy bajo.
Quince minutos para ventilar
Otros consejos son los de no dedicar más de quince minutos a ventilar la habitación, cerrar las puertas y las llaves de los radiadores de las habitaciones que no se usen, bajar las persianas por la noche y valorar la posibilidad de cambiar las calefacciones de gasoil por otras de biomasa, que gastan menos de la mitad.
Si la vivienda dispone de un solo termostato, pero se quiere tener diferentes ambientes de temperaturas, es posible instalar cabezales termostáticos en los radiadores para lograr habitaciones a diferentes temperaturas.
FUENTE: Europapress